Tras tres años en el penal del Puerto de Santa María, El Lute aprovecha las fiestas de Navidad y escapa de la prisión para reencontrarse con su familia e iniciar un recorrido por Andalucía con la Guardia Civil en los talones. El Lute lucha denodadamente por su vida y su libertad; su sueño de vivir como los payos es tan fuerte que nada puede detenerlo.