Un submarino americano sale de Tierra del Fuego, y uno de sus tripulantes ha traído secretamente a bordo un contenedor lleno de serpientes venenosas que escapan del almacén y muerden a personal clave del submarino, provocando un accidente que inutiliza el vehículo de forma que cae al fondo del Océano Antártico. Peor aún, las serpientes siguen sueltas en el submarino y complican los esfuerzos de la tripulación por escapar de la nave hundida.