El título de esta película argentina parece sugerir un tracto antidrogas explotador. Si bien es cierto que Marihuana se inclina hacia la estridencia y la inseguridad, tiene muchas más opciones que, por ejemplo, Reefer Madness. López Lagar interpreta a un prominente cirujano cuya esposa adicta al bote es asesinada en circunstancias sórdidas. Jurando venganza, el doctor se aventura en la subcultura de drogas de Buenos Aires para encontrar al asesino de su esposa. Encuentra algunos amigos fieles en el camino, especialmente una cantante (Fanny Navarro) y un pianista (Nathan Pinzon). Desafortunadamente, el cirujano se convierte en lo mismo que desprecia cuando toma la maleza. El clímax enfrenta a los buenos contra las fuerzas malignas de un narcotraficante (Eduardo Cuitino) y su pandilla. Hector Quintanilla proporciona un poco de humor intencional como un tonto tonto.