Elizabeth Roffe, heredera de un gigantesco imperio farmacéutico, sigue el ejemplo de su padre y mantiene el carácter familiar de la empresa. Sin embargo, algunos familiares que necesitan dinero la presionan para que venda las acciones; uno de ellos intenta incluso eliminarla. Averiguar quién puede ser el asesino no es tarea fácil porque no puede confiar en nadie.