Una pareja de buceadores disfrutan de la belleza subacuática cuando uno de ellos descubre el cadáver de un capitán de barco atado a otros cuatro cuerpos. Los resultados de las autopsias revelan que los pulmones de los cadáveres estaban llenos de agua, lo que indica que las víctimas fueron lanzadas al agua vivas. En el transcurso de la investigación, el equipo del C.S.I. confirma que se trata de la tripulación del Eileen, un barco que se estaba involucrado en el transporte ilegal de armas.