James Rush, un joven oficial de la Marina, fallece cuando el automóvil que conduce hace explosión mientras participaba en una carrera ilegal. Las primeras pesquisas apuntan a que el vehículo fue saboteado. Poco después, los agentes del NCIS corroboran que el principal rival de Rush era su ex-novia y que el militar había robado dos sofisticados sistemas de batería de litio de su unidad días antes de la celebración de la carrera.