Tras renacer en la antigüedad, antes de la Gran Guerra del Aplazamiento de Dios, Li Changshou se convierte en un cultivador menor. Su único sueño es vivir una larga vida como cultivador. Para sobrevivir en los crueles Tiempos Primordiales, Li Changshou se esfuerza por no acumular karma: matar conduce inevitablemente a enemistades. Por ello, siempre planifica a fondo antes de hacer nada y nunca se permite entrar en situaciones peligrosas. Esconde bien sus bazas, se entrena en técnicas de escape, refina píldoras venenosas y domina sus habilidades místicas. En un principio, Li Changshou planea permanecer oculto y a salvo en la montaña. Allí, se supone que cultivará hasta ascender a la inmortalidad. Sin embargo, todo cambia un año cuando su maestro parece pensar que sus vidas son demasiado tranquilas, y acoge a una hermana menor...