Durante una persecución policial en un parque cerca del puerto, los agentes encuentran a dos personas asesinadas. La mujer desmembrada y violada. El servicio de víctimas especiales inician la búsqueda en un joven, acusado de torturar animales, y que realiza una terapia dentro del servicio de la Agencia para la Crueldad de Animales (MFPCA). Sin embargo, una vez hallada uno de los miembros de la víctima descubren que se trataba de una agente especial de la MFPCA, y que uno de los agentes de este servicio cumplió condena de siete años de cárcel por violación.