Quién le iba a decir a Sofía que su ex se convertiría en uno de sus principales apoyos frente a sus compañeros. Sin embargo, no pierde ocasión de reprocharle que "se la pegara". Joao, mientras tanto, aprende a desfilar con uno de los bikinis de Mª Jesús. Mayte, en el mirador, vive amargada la marcha de Fernando.