Luna comparte con Laura su nerviosismo ante el chantaje al que la somete el juez. Laura, como letrada y como amiga, le ruega que no se preste a él. Pero no parecen encontrar una solución para evitar que Manuel salga libre. Y para complicar aún más las cosas, Ingrid, siempre enfrentada a Luna, consigue que su madre, Emilia, se presente en la ciudad por sorpresa. Bajo la losa de la amenaza del juez, ante el peligro que Ingrid se vengue confesando a Emilia la auténtica profesión de Luna, todos se vuelcan en una mascarada para que la madre vuelva al pueblo sin descubrir nada de nada. En paralelo, Cristina va con Esteban a casa de sus padres. Hoy es un día muy especial. Poco a poco se descubre la historia: Marta, la hermana gemela de Cristina, murió en un accidente de coche porque ésta conducía borracha. Pero su padre, un político reconocido, ocultó la verdad con tal de dejar libre a su otra hija. Cristina, que se siente culpable, detesta a su padre y le humilla siempre que puede. Un control policial impide que Esteban y Cristina repitan el trágico suceso que acabó con la vida de su hermana. Finalmente, Luna cede al chantaje del juez. Lo graba todo en un cassette pero Laura le aclara que eso, en un juicio, no serviría de nada. Además, Manuel finalmente ha salido libre.