Annie se hace amiga de un psíquico que perdió la mayor parte de su "sexto sentido" en un accidente y no ha podido comunicarse con los espíritus desde entonces. Su espectáculo en el escenario una vez terrible ahora sirve para ayudar a los fantasmas a enviar sus últimos mensajes a sus seres queridos -algo que Annie también hace cuando su madre asiste al espectáculo-. La relación de George con Sam se vuelve más seria, pero cuando una noche de padres y maestros cae en luna llena, las fuerzas de George para mentir acerca de sus planes para ocultar su secreto salen mal. Mitchell tiene previsto dejar el aquelarre para iniciar una vida con Lucy, pero sin él saberlo Lucy ayuda a Kemp a hacer una explosión en la funeraria, matando a la mayoría de los vampiros.