El subordinado de Reinhold del gremio de transporte acuático, el "Barco del Sauce Dorado", se encuentra husmeando en el terreno de la "Escama del Dragón de Agua". Su patrón, Gotthard, acude a Reinhold pidiendo una compensación, pero, por desgracia, lo único que pueden ceder son los derechos de pesca del río. Supuestamente, está lleno de ricas anguilas, pero la gente dice que su olor fangoso las hace impopulares como alimento...