Los pingüinos llevan sus misiones en su hábitat en el Parque Central. Aparecen Julien, el rey de los lémures, y sus súbditos Maurice y Mort, sus nuevos vecinos, que constituyen la exhibición de lémures en el zoológico. Ahora los pingüinos deben mantener las cosas bajo control, a menudo a pesar de las payasadas de los lémures así como auxiliar en labores poco comunes o aventuras fuera de lo común. Skipper rara vez llama al Rey Julien por su nombre, dirigiéndose a él siempre como "Cola anillada" (por ser un lemur de cola anillada).