Plácido ve en el periódico que Don Justo ha salido de la cárcel y está decidido a recuperar su trabajo, sin embargo cuando va a buscar a su exjefe, éste lo hace esperar, lo trata como su sirviente y le pide que el que se presente al empleo sea Aldolfo. Aldolfo se rehúsa a ser parte del sistema capitalista, pero la familia lo convencerá de aceptar la oferta.