Aichi parece decaído desde que perdió ante Arata. De hecho, una nube oscura se cierne sobre todo el club karuta porque se acercan los exámenes finales. Para salir de la oscuridad, Chihaya, Kanade y Sumire deciden hacer chocolates de San Valentín para el club como sorpresa. Chihaya no tiene experiencia en la elaboración de dulces, pero lo da todo con la esperanza de devolverle la sonrisa al trabajador Taichi.