Danny consigue un Impala de 1967 fantástico, pero cuando llega el momento de entregar las llaves a un cliente importante, Danny no cree que pueda dejarla ir. Mientras tanto, Roli hace lo impensable y pone en peligro el principal proyecto de la tienda. Danny retrocede en el tiempo cuando un viejo amigo le muestra un Ford de 1914 que se dirige al Smithsonian. Danny y Ryan creen que han visto un fantasma cuando ven a la venta un buggy Meyers Manx Dune que se parece mucho a sus viejos Sparkles favoritos.